martes, 17 de enero de 2012

Eros eres tú y no eres un error

Partiendo de la base de que estamos destinadas es muy probable que si volviéramos a nacer, volvería a encontrarte y, sin duda, volvería a elegirte.
Quizá tendría la necesidad de inventar una canción que nos uniera porque ninguna sería capaz de reflejar cuanto deseo encontrarte. 
Si no existiera, a lo mejor, tendría la capacidad de inventar un arte como el teatro para tener un tema de conversación eterno la primera vez que nos viéramos.
Si por casualidad conoces una muestra de cariño mayor que el beso en la realidad en la que vives, dame las gracias a mi que la creé para ti desde la mía.
¿Conoces la felicidad? Cuídala, que también la creé para ti.
Y como me puse a crear pensé que necesitarías un oficio. Como ya tienes musa y talento innato ¿qué mejor que ser poeta? Y como todo poeta debes tener un vicio. Fuma todo lo que quieras, que nada ni nadie va a poder contigo. Que yo inventé a los mosqueteros y me uní a ellos. Y yo fui su mosquetera. Y ahora soy la tuya.
También inventé a los Reyes Magos y creía en ellos para que te dejaras la piel buscando a quién pertenecías y por dónde debías dejarte caer y ahora estás aquí.
Y entre tanta invención y creación me dio por inventar una broma para las dos y por casualidad inventé el amor. Y los te quiero llegaron poco después.


Si tienes a tu musa cerca, aunque sea en clase, pasan estas cosas.

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